La Comunidad Campesina de Huayllapa posee un gran conocimiento ancestral del territorio comunal y conoce el valor de sus ecosistemas naturales y culturales. Es por esto que los comuneros toman iniciativa y se hacen titulares del ACP Huayllapa.

Los primeros estudios de la Cordillera Huayhuash fueron por parte de un estudio realizado por Antonio Raimondi que transitó por el lado oriental desde Queropalca a Cajatambo; visitando la laguna de Viconga y al cruzar el paso de Portachuelo a 4,800 msnm, observó en su integridad todo el paisaje de los lados oriental, occidental y el sur de la Cordillera Huayhuash y el lado oeste de la Cordillera Raura.

Al referirse a la orografía de la Provincia de Cajatambo, explica que la Cordillera Blanca forma una especie de nudo, del que se desprenden muchas ramas, dando lugar a un verdadero laberinto de quebradas. Además especifica la formación geológica de las rocas y la composición mineralógica de estas.

Por otro lado, el geógrafo Alemán Dr. Wilhem Sievers exploró la Cordillera Huayhuash, siguiendo el itinerario del norte hacia el sur por el lado oriental; en el año de 1909 desde Queropalca cruzó por el paso de Ararac a 4,750 msnm., llegando a la provincia de Cajatambo y a los límites de tierras de la propiedad Comunal de Huayllapa; de las características topográficas y geográficas, elaboró un mapa en donde considera en un solo bloque a las tres Cordilleras: Raura, Huayhuash y Huallanca.

En 1936 arribó la expedición de la Sociedad Alpina Austriaca – Alemana, explorando todo el perímetro de la Cordillera Huayhuash, realizando estudios científicos y el andinismo, dentro de la propiedad Comunal de Huayllapa.

Conocedora la comunidad de los valores naturales que encierra el área decide de manera conjunta solicitar al Estado el reconocimiento del ACP Huayllapa.

Sobre el sitio de conservación
La Biodiversidad del ACP Huayllapa está bien representada por las especies de flora y fauna así como también de los rasgos y patrimonios culturales de la zona. A nivel de la flora se distinguen diversas comunidades vegetales de distintos hábitats, que reúnen a más de 134 especies de flora común y endémica y en las cuales las asteráceas, poaceas, fabáceas y escrofulariaceas son las que muestran mayor representatividad.

Existen ecosistemas como los matorrales, bofedales, oconales y comunidades como los bosques de Polylepis webervaueri “queñoa”, los rodales de Polylepis microphila que representan ecosistemas únicos de protección y albergue de la fauna, estos son de prioridad para la conservación al igual que los rodales de Buddleja incana y la vegetación saxícola con importantes especies de orquídeas únicas para la zona.

La fauna presente en el ACP Huayllapa se caracteriza principalmente por su diversidad de formas adaptadas a condiciones extremas. La marcada gradiente altitudinal presente en el ACP, ocasiona el establecimiento de diferentes tipos de hábitats disponibles para los animales.

Estas características ecológicas permiten el establecimiento de una importante fauna silvestre, principalmente de aquellas que son típicas de la zona, aquellas que tienen distribución restringida como las especies endémicas y aquellas que están protegidas en alguna categoría de peligro o de especial importancia económico-cultural y ecológica. Este principio ha permitido la incorporación de la zona como área para la conservación de aves (IBA) así como también las aves que son representativas para las áreas de endemismo (EBA).

El grupo de los reptiles y anfibios también muestran representatividad específica de distribución endémica, tales podemos mencionar a algunas especies como Bufo limensis, Gastrotheca peruana, Telmatobius carillae, Microlophus koepckeorum, Stenocercus chrysopygus, entre otros. El ACP Huayllapa contiene también especies de mamíferos con importancia para la conservación, y como potencial fuente de materia prima como la “vicuña” para la industria textil y desarrollo de la población local.