Los bosques de Polylepis cumplan una función importante de regulador climático, controlador de la escorrentía superficial y último refugio y hábitat de especies de aves en peligro de extinción. Uno de estos bosques de Polylepis que encontramos en la Cordillera de Vilcanota en los Andes peruanos es el Bosque de Abra Málaga Thastayoc.
Personas de Contacto:
Tomás Quispe Quispe
Teléfonos:
984337179
Correo:
goyofm@hotmail.com
Ubicación:
Cusco
Extensión:
70.644 ha
Norma:
R.M. Nº 004-2009-MINAM, Fecha de Publicación 18.01.09
Vigencia:
Perpetuo
Objetos de
Conservación:
La fuerte presión antropogénica que soportaba el bosque de Polylepis de Abra Málaga Thastayoc casi termina por destruir por completo éste pequeño espacio; un lugar que en sus pocas hectáreas refleja una gran importancia ecosistémica, con una variada biodiversidad.
Años atrás, los miembros de la Asociación Agraria Abra Málaga Thastayoc en coordinación con la Asociación Ecosistemas Andinos-ECOAN, orientaron todos sus esfuerzos de conservación a recuperar y conservar este bosque asumiéndose labores de sensibilización en los pobladores de la zona y asumiendo, cada uno de estos, el compromiso de parar con la destrucción de éste recurso y orientar los trabajos a conservarlo y protegerlo. Fueron arduos años de labor pero el resultado es poder decir que ahora el bosque de Abra Málaga Thastayoc se encuentra recuperado y continúa luchando por consolidar su conservación. Para ello se ha recurrido a la estrategia legal de generar un Área de Conservación Privada en esta zona, lo que permitirá realizar acciones en aras de la conservación de los recursos del ACP.
El Área
El Área de Conservación Privada Abra Málaga Thastayoc-Royal Cinclodes destaca por su gran biodiversidad y los procesos ecológicos que en su interior se desarrollan; lo que más se puede ver son los árboles de Polylepis, encontrándose también en esta quebrada formaciones boscosas de Escallonia (chachacomo), las cuales representan sistemas biológicos únicos caracterizados por tener distribución restringida, por lo que son de gran interés ecológico, sistemático y biogeográfico. Sin embargo, y a pesar de la importancia biológica, éste bosque representa uno de los hábitats más vulnerables de los altos andes, por la creciente presión humana debido a factores económicos, sociales y culturales. El bosque se halla en la base del nevado “Qosñiriti”, inicio de la cadena del nevado la Verónica, asimismo del mismo bosque se puede observar el nevado Alancoma.
El bosque de Abra Málaga Thastayoc, se encuentra entre los 3600 a 4500 msnm.; está conformado por un bosque homogéneo de Polylepis pepei y un 7% de Gynoxis aff nitida. El bosque de Polylepis es vital para disminuir la erosión de los suelos ya que retiene los nutrientes y sedimentos, y produce una cantidad vital de oxigeno. Durante la estación seca descargan gradualmente el agua almacenada durante la época de lluvias dentro de los musgos.
Además a lo largo de la Cordillera del Vilcanota se encuentran una serie de nevados, que constituyen las principales captaciones de agua, destinadas a la agricultura intensiva del piso de valle. Según Jon Fjeldsa, un experto renombrado en avifauna, manifiesta que en el futuro, estas áreas serían importantes para la conservación de agua y la biodiversidad, un potencial para desarrollar proyectos hidroeléctricos y de irrigación. Asimismo tiene la hipótesis que estas áreas podrían permanecer relativamente estables a los efectos del cambio climático.
El bosque de Polylepis del ACP contiene poblaciones de aves endémicas como el Leptasthenura xenothorax, el Cinclodes aricomae, y el Anairetes alpinus. Otras especies que podemos hallar en este bosque es el puma (Puma concolor), la vizcacha (Lagidium peruanum), algunos murciélagos y roedores (Akodon sp), la taruca (Hippocamelus antisensis) que se halla presente en la zona de las peñas y que está amenazada por la caza furtiva, el ciervo de cola blanca (Odocoileus virginianus), el gato andino (Felis jacobita).
Como ruta de acceso al ACP, se tiene la carretera asfaltada Cusco- Quillabamba con un tramo de recorrido de 130 Km, con un tiempo aproximado de 2 horas y media. Esta comunidad se encuentra a las faldas del nevado Qosñiriti. Entre los meses de mayo a diciembre es la mejor temporada para visitar el ACP.
Los turistas que visitan el ACP pueden alojarse en la casa comunal que en un futuro se constituirá como el Centro de Interpretación.
Entre las actividades principales que se realiza dentro del ACP son: recuperación, conservación y preservación de la biodiversidad del bosque de Polylepis; programas de forestación y reforestación; evaluaciones de flora, avifauna, mapeo y diagnósticos socio-económicos de la zona; planes de monitores; proyectos de educación ambiental al interior de la comunidad; así como donaciones periódicas de leña de Eucalipto a la comunidad que permitan minimizar el impacto a los queñuales y por ende al bosque.