Foto: Piero Rengifo.

Por Piero Rengifo, especialista en sistema de información geográfica (SIG) de Conservamos por Naturaleza. 

Cuando mis amigos me preguntan si la gente local participa en la reforestación comunitaria, les digo que, en algunos lugares del Perú, las personas están comprometidas con el cambio. Mediante la plantación de árboles nativos, ellas y ellos están trabajando por un futuro mejor para sus hijos y las generaciones venideras. 

La restauración ecológica es fundamental para recuperar y proteger nuestros ecosistemas naturales. En los centros poblados de Cocachimba, La Coca y la Comunidad Campesina de San Pablo en el Valle de las Cataratas, ubicadas en Amazonas, se han identificado espacios que han sufrido perdida de la cobertura boscosa por diferentes actividades antrópicas que han modificado considerablemente el paisaje. 

Estas actividades, que las solíamos hacer principalmente por desconocimiento, afectan a las especies de flora y fauna silvestre del lugar de manera significativa. Cuando notamos, preocupados, la pérdida de biodiversidad a partir de esas actividades, nos propusimos generar un cambio para recuperar aquellos espacios que fueron degradados o afectados. En ese sentido, nos propusimos generar corredores que conecten y faciliten la restauración de nuestros bosques mediante la reforestación con especies nativas de la zona. 

Así, los moradores del Valle de las Cataratas comprometidos con la conservación del medio ambiente se han organizado para hacerle frente a este problema para restaurar y recuperar la biodiversidad y los servicios ecosistémicos mediante la identificación y monitoreo de especies de animales y vegetación, observación de patrones de migración, el seguimiento de poblaciones y la recolección de datos sobre las amenazas a la biodiversidad, entre otras acciones. 

Desde Reforestamos por Naturaleza, iniciamos los trabajos de restauración ecológica en la Valle de las cataratas, junto a los comités ambientales, asociaciones de turismo, municipalidad distrital de Valera, dueños de predios agrícolas, vecinas y vecinos voluntarios. Gracias a esta suma de esfuerzos y con la participación de 55 personas involucradas, se ha logrado reforestar un total de 5000 árboles nativos entre ellos alisos, moras, limoncillos y pajuros.  

Esta iniciativa no solo ayudará a proteger la flora y fauna del lugar, sino que también contribuirá a la mitigación del cambio climático y la conservación de los recursos naturales.  

Agradecemos a las autoridades, población local y a todas las personas involucradas en esta iniciativa de conservación por su compromiso con el cuidado del medio ambiente y esperamos que este sea un ejemplo a seguir para otras comunidades y proyectos en el país. 

¡Sigamos trabajando juntos por un futuro más sostenible y saludable para todos! 

¡Súmate! 

Si deseas ser parte de esta iniciativa y promover la conservación de nuestras especies nativas de árboles, puedes adoptar un árbol por S/50 en reforesta.pe